"Ahora que han pasado tantos años, pienso que no hubo forma de evitar que los tres nos destrozásemos la vida los unos a otros."
"Otros ven el barro, las piedras. Yo veo el diamante que será."
"Algo de tu alma quedará en esta cabaña, seguirás velando por nosotras hasta que ya no seamos capaces de bucear más."
"Había llegado el día, ese día en que los hermanos rompen definitivamente el cordón umbilical que los une."
"Así comenzaron los recuerdos como los mejores años de mi vida."
Una historia que atrapa desde el prólogo. Narrada a tres voces, y en donde viajaremos de Manacor, en Mallorca, a Tahití y Japón, en diferentes momentos. Haremos un recorrido a través de 4 décadas, de 1889 a 1930, por medio de capítulos cortos que hacen más fluída la lectura, y se irán intercalando los narradores, desde su perspectiva y su época.
Una trama principal, y subtramas, llenas de historia y conocimiento.
Relaciones que se dan, y se rompen por callar verdades y presuponer. Silencios mal interpretados, secretos ocultos, traiciones, engaños, amor y desamor, sangre y muerte. Esperanzas que murieron, y decepciones que mataron en vida, e hicieron abandonar y escapar lejos. Y al final darse cuenta que la vida pasa, se aproveche o no.
Más que una historia de amor, de pasión y fatalidades, que pese al dolor es preciosa, se habla de la importancia de los lazos familiares, sean o no de sangre, del trabajo, la superación, y la entrega total por lo que se ama.
Teniendo como telón el deslumbrante mundo de las perlas, las naturales conseguidas a base de buceo y excelentes pulmones, hasta el origen de las que son cultivadas. Así como el enigmático mundo de las ama, las buceadoras recolectoras de Japón.
Un libro lleno de aventuras y pasión, donde la vida de los hermanos Fortuny: Bastian y Hugo, se entrelazan con la de Laia, la hija de un cónsul inglés exiliado... y sus vidas combustionan.
Eva García Sáenz de Urturi, es garantía total, y nunca, nunca decepciona.
¡Me gustó muchísimo!