miércoles, 27 de mayo de 2015

Volver del abismo... para seguir viviendo...

" Somos nuestro propio ángel, y hacemos de este mundo nuestro propio paraíso" 


Dos familias: Los Madison y los Noriega.
Familias contemporáneas, actuales, de la vida real, de la vida misma. Como la propia, como la de un amigo.
Los primeros, con la plenitud sonriéndoles a cada paso, a cada instante. 
Los Noriega, sufriendo las vicisitudes de la vida. Esas que nos presentan su peor cara,y a las que tienen que ver a diario y luchar contra ellas.

Existencias en común, pero ajenas unas de otras, mas con el paso del tiempo, van entretejiendo una red de similitudes, de momentos, de espacios, de encuentros, de dolor, de desencuentros, de amistad y fatalidad.

Con unos personajes que se presentan todos como principales por su valía, su arrojo, su importancia, su entrega.

Con el amor flotando entre ellos. El amor en todas sus versiones, en todos sus contextos: Amor de pareja, de hermandades, de amistad, de familia. Amor que da vida. Amor que supera. Amor que perdona. Amor que traspasa tiempos y distancias. Amor al deporte de los sueños. Amor que acepta sin cuestionar. Amor de segundas oportunidades.

Y como en la vida misma, ni toda la felicidad dura para siempre; ni todas las desgracias pueden caer sobre las mismas personas.
Una serie de acontecimientos,va cimbrando la vida de cada uno, y cada uno, dependiendo de su aplomo, su fortaleza e integridad, es que saldrá "avanti" de los abismos en que caen, en que se desploman. Esos abismos que asfixian, que ahogan, que derrumban sueños, que trastocan metas. Esos abismos que sin la mano amiga adecuada, podrían ser el fin de la vida misma.
Nos muestra que la existencia es como un espejo, la imagen que tú le proyectes es la misma que se te devolverá, tarde o temprano.
Nos hace ver que los lazos de sangre llaman, pero que aunque la sangre que corre por las venas no sea la misma, esa unión puede ser tan o más poderosa que la que conlleva ser parte de la misma estirpe. Nos enseña que el amor de un hermano, puede ser más real, más fuerte, más estable, más poderoso, que la de un sentimiento apasionado.

Historias de vida. Historias de lucha. De sobreponerse o de hundirse.
Traiciones, abandonos, golpes, heridas... arrepentimientos, perdones y sanaciones.
Octavio y Solana, Wen y Delfina, Esteban y Victoria, Lucio y Salvadora, Martín y Vivian.
Beltrán, Sara,  Humberto, Oriana, Alondra,Clara, Nadia...

Victoria es la médula, una mujer que en su nombre lleva intrínseco el triunfo frente a los fracasos. Es esa dama, la matriarca de los Madison, que sacando poderío de sus entrañas, sobreponiéndose a sus miedos y a su dolor, es quien maneja, quien alienta, la que soporta,la que indaga, la que defiende, la que busca...y finalmente,encuentra. Es el tronco poderoso. Es la fuerza maternal. Es la pasión hecha mujer.

Sara tiene una valía especial. Es esa niña que ama por sobre todas las cosas un deporte. La que se entrega. La que sobresale. La que es el alma de su equipo. La certera, quien nunca falla...y cuando su abismo personal cae sobre ella, a pesar del dolor, de la frustración, de sentir que la vida se termina sin seis meses sin jugar... con un aplomo de adulto, con una entereza impresionante, da cátedra de lo que es amar algo y luchar hasta el fin por ello. Sara es la fuerza, el temperamento de hierro, la voluntad imperiosa. Sara es un personaje entrañable... y Sara es real, por eso, me robó el corazón.

Un libro que se "clava en el alma" por su realismo, su crudeza, su belleza, su renacer.
Un libro de esos que no pasan en vano. De esos que por algo llegan a tu vida.
Un libro lleno de tanto, que en momentos te sobrepasa, y tienes que parar para poder tomar aire y respirar. 
De esos libros que cortan el aliento. Que te estremecen las entrañas. Que hacen doler el espíritu.
Un libro lleno de vidas.Un libro lleno de vida.
Con voz propia. Con alma. 
Escrito con una prosa poética sublime que subyuga, que enternece, que se cuela por los poros, y hace transpirar lo que estás leyendo.
Con una calidad apabullante.Con maestría, con clase, con un estilo propio y muy particular de su escritora.

Laura querida, mi escritora admirada, mi amiga adorada...
Decirte que me has robado el alma, es decir la verdad.
Ya tu "Amuleto" me había ganado, pues me gustó enormemente y se me coló muy dentro... pero éste, tu "Abismo" es superior. Te superaste de una manera impresionante. Superaste todas mis expectativas, todo lo pensado e imaginado.

"Volver del Abismo" toca las fibras más sensibles, pues todos en un momento, hemos sido víctimas de él. Todos en nuestro caminar hemos tenido que sobreponernos a algún abismo en particular, y eso lo hace real y tangible.
Gracias Laura por estas historias, gracias por este libro.
Gracias por el manejo de los sentimientos, por la destreza de tu pluma.
Gracias por presentarnos la vida como es... Gracias por abrirnos tu ser y dejarnos ver dentro de él... 
Y gracias, por prestarnos la historia de "tu orgullo"...insuperable...
Te quiero siempre... y "no hay riesgo de olvido".