"BRUMA AZUL"...envolviendo los sentidos.

"Allí, entre aquella espesa bruma azul, soñé que mi vida era otra".

Lean Mac.Lean carga sobre sí una maldición otorgada desde antes de nacer. Su llegada al mundo no es fácil, y el vivir en ella, mucho menos aún. Pero con la fortaleza de un león, nace y resurge, con el único motivo en mente de vivir para tomar revancha.

Con una infancia cruel, atroz, denigrante. Con pasajes desgarradores y una brutalidad cometida contra su persona que lo hacen ponerse una coraza ante cualquier sentimiento, menos en el de la venganza, a quien toma como baluarte para resurgir prácticamente de la muerte, y hacer rugir sus entrañas.

Es así, que deja Sevilla y vuelve a una Escocia convulsionada y en guerra, creando pactos con uno y otro clan, con la única finalidad de tener enfrente a sus verdugos.

Junto a sus hombres, y el pequeño Dante,quien está a su cargo, emprenden un trayecto lleno de vicisitudes, de largas jornadas a caballo, y peligros en los caminos, y es aquí donde Lean se ve envuelto en un triángulo amoroso entre Ayleen, su amiga desde la infancia, y Cora, la ex mujer de su hermano Héctor. Y ese corazón marchito, herido, seco… empieza a latir nuevamente, y cada latido lleva inmerso un nombre.

Con sentimientos encontrados, dudas respecto a cómo actuar, titubeos de su alma por no saber si seguir por el camino andado, o tomar ese nuevo que la vida le presenta, empieza a vivir mil y un periplos, hasta que toma la decisión que siente que es la adecuada, la que lo hace sentir pleno, y la que lo hará vivir conforme a sus sueños y deseos.

Pero un vuelco en la historia, un revierto duro, doloroso, cruel, desalmado, lo hace replantearse, no sólo el camino elegido, sino su vida misma.

Narrado por Lean en primera persona, viviendo en el presente y yéndonos a recordar su terrible pasado por medio de flashbacks, nos vemos inmersos en una historia delineada con maestría de principio a fin.

Con una pluma elegante, detallada, descriptiva,  precisa y mágica, nos adentramos en la trastornada historia de los highlanders y sus luchas para erigirse como el clan predominante en los parajes indómitos de Escocia.

Con frases, párrafos y líneas tan maravillosamente escritas, que nos hacen leer y releer una y mil veces, hasta que podemos grabarlas a fuego en el corazón.

Con escenas tan gráficas, que podemos sentir que estamos dentro de la trama. Con una documentación  tan precisa, que podemos retroceder en el tiempo, y sentirnos un highlander más. Con la dosis perfecta y exacta ente romance, historia, y erotismo. Con una pasión que envuelve y desata el palpitar agitado de nuestros corazones.

Lean, con esa belleza salvaje sarracena y gaélica. Con una fortaleza y coraje, que hacen que su agrietado corazón, resurja y siga latiendo. Con una luz poderosa que lo hace brillar, incluso estando perdido en el túnel más oscuro. Con su desparpajo ante la vida, y sabedor del poder e influjo que tiene ante el género femenino.

Ayleen, bella, fuerte, fiel amiga, entregada, generosa. Con una capacidad de amar, incomparable. Cora, enigmática, apasionada y leal en todo momento. Sabedora de oscuridades lacerantes, y aun así, entregada y amante hasta el último aliento. Alaister, el amigo fiel. Comprensivo aun en la incomprensión de los actos, de las decisiones y de las elecciones tomadas.

Un libro de esos que se quedan tatuados en la piel, como El Crann Bethadh que lleva nuestro león en su pecho. De esos que quieres volver a leer, y saborear letra a letra, deseando que su sapidez se quede impregnada por siempre en nuestros sentidos. Una historia oscura, marcada por el dolor vivido en la infancia, pero que renace con los colores mágicos de una aurora boreal, gracias al embrujo del amor.

Lola querida, ¿si sabes que tienes magia verdad? Magia en tu ser, en tus pensamientos, en tu alma. En esa pluma etérea y sublime que deslizas para crear historias para la historia. Magia en tus personajes. Magia en tu derredor.

Te lo he dicho, y lo sostengo, ¡Siempre a tu lado amiga querida!, porque te quiero entrañablemente y te admiro desde el fondo de mi ser.

¡Gracias por este león, que desgarró mi alma, y ahí se quedó a vivir!